martes, julio 26, 2011

Concepción del Paraguay





Una vez mas tenemos que hablar de la calidad humana que hemos encontrado en el río, este pueblo no descansa para brindar cordialidad y a su vez mostrar con entusiasmo su interés por nuestra expedición. A los ojos de quienes nos ven pasar la sorpresa es el primer impacto al divisarnos deslizándonos por las aguas en esas pequeñas embarcaciones que no se explican como hacemos para entrar y mantenernos a flote sin volcarnos, enseguida hacen seña de que nos acerquemos nomás y nos convidan a pasar y dar paso a las charlas, que son como breves presentaciones de vidas, que sorprendentemente se encuentran para entablar por un instante una amistad que quedara en el recuerdo de todos por siempre.
Al salir de Puerto Mourtiños en el Brasil, tuvimos la suerte de despedirnos de ese país con música, especialmente dedicada para nosotros los viajeros de las aguas. Desde una posada un grupo de turistas nos llamaron e invitaron a pasar allí conocimos sus dueños Tonino y Concepción que con música en vivo y café nos dieron el animo para adentrarnos en territorio exclusivamente Paraguayo.
Este traspaso de límites otra vez nos brinda la oportunidad para expresar la insignificancia de los límites, ya que lo único que cambia son los idiomas, deberíamos hacer un esfuerzo para que en vez de separarnos aprovechar la cultura y las raíces ancestrales y entablar una relación entre pueblos más cordial y adecuada a cada lugar.
La deforestación es un problema debido al avance de las actividades humanas, impactando gravemente los recursos forestales. Así como la caza descontrolada amenaza la fauna de la región.
La mayoría de las especies forestales están en peligro de extinción. Los animales tampoco se escapan de este flagelo. Los que más problemas tienen son: el puma y yaguareté.
En el río el tráfico de grandes barcazas se va intensificando, la hidrovia avanza silenciosamente transportando los recursos minerales de la zona de Corumbá y los granos agrícolas de la región de Mato Grosso y Mato Grosso do Sul. Este río nos invita a hacer una reflexión permanente sobre estas cuestiones. Vemos y hablamos con la gente y nadie parece entender ni saber cual va a ser en destino de esta arteria hacia el corazón geográfico de América Latina a nuestro entender no es tan feliz su destino si se represan sus nacientes y ríos tributarios. Y si se hacen canales para facilitar la navegación de grandes buques.

A pocos días de llegar a Asunción del Paraguay el ánimo se mantiene alto al saber que el camino andado, metro a metro a flor del agua, con mucho esfuerzo, pero con la convicción de que ya conocemos en cuerpo y alma las entrañas de este río que nos deja avanzar y nos hace sentir hijos de su líquido vientre.
Hasta pronto…

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